▶ Esto es lo que tienes que saber de la HERNIA DISCAL CERVICAL◀




La mayoría de las personas padece hernias discales a lo largo de su vida, sin embargo tienen solución. David Izquierdo, gerente del Instituto francés de columna Biziondo, te cuenta con detalle sobre las hernias de disco cervical.

La columna cervical está constituida por 7 vértebras apiladas y separadas por discos, con excepción de la primera y la segunda (C1-C2). 

En medio de la columna vertebral se encuentra el canal raquídeo que contiene la médula espinal. En cada nivel, una raíz nerviosa se desprende desde la médula espinal tanto a nivel derecho como izquierdo, salen del canal central por aberturas (canal de conjugación o foraminal) situados lateralmente a la altura de los discos intervertebrales.

El disco interveretebral normal es una estructura aplanada, cilíndrica que une 2 vértebras y juega un papel de amortiguador. Está compuesto de un núcleo central gelatinoso (Nucleous) y de un anillo periférico fibrosos (annulus).

El deterioro discal se caracteriza por dehiscencias o fisuras del anillo fibroso. Las causas suelen ser la deshidratación debida al envejecimiento, microtraumatismos debidos a problemas asociados a la movilidad y en ocasiones por traumatismos por esguinces cervicales. En casos de fisura, el núcleo puede migrar al interior del disco sin expandir el anillo y ocasionar cervicalgias agudas de tipo tortícolis o cervicalgias crónicas.

Si la migración es más importante, el núcleo puede atravesar casi la totalidad del aniño y aparecer en la cara posterior del disco formando una hernia. Esta hernia puede, debido a una ruptura completa del anillo, migrar al canal medular o foraminal. Entonces, la hernia puede comprimir estructuras nerviosas contenidas en el canal cervical (raíces periféricas más frecuentemente, y la médula espinal en más raras ocasiones).

La compresión de una raíz nerviosa va a desarrollar una Neuralgia Cervicobraquial o cervicalgia, una equivalencia de “ciática” del brazo con un dolor irradiado sobre todo o alguna parte del miembro superior pudiendo llegar hasta los dedos. Este dolor puede acompañarse de problemas de sensibilidad como hormigueos, pinchazos -parestesias-, o sensaciones anómalas dedos más gordos -disestesias-, que pueden evolucionar hasta una pérdida de la sensibilidad (anestesia).

También puede existir problemas en la motricidad (desde una simple sensación de debilidad, apreciar pérdida franca de la fuerza muscular que puede llegar en algunas ocasiones hasta la parálisis parcial o completa de una parte del miembro superior).

La compresión de la médula espinal puede desencadenar problemas sensitivos o motores en los miembros superiores y/o inferiores. La existencia de problemas neurológicos sensitivos y/o motores obliga a consultar rápidamente.

¿Cómo saber si tengo una hernia discal cervical?
Es necesario que acuda a un especialista en columna para que revise su caso, primeramente se realiza un examen físico para valorar la sensibilidad, en algunos casos el examen físico incluye algunas pruebas sencillas como caminar, evaluación de reflejos.

Sin embargo el diagnóstico de la hernia de disco cervical se realiza principalmente por una Resonancia Magnética o una Tomografía Axial Computarizada (TAC o Scanner). De no existir afectación neurológica importante como las parálisis, no existe urgencia para realizar estos exámenes. 

Una vez realizados, estas pruebas permitirán visualizar la hernia y explicar el dolor del paciente.

Tratamiento sin cirugía para hernia discal cervical 

Más del 80% de las hernias discales se curan en menos de 2 meses con tratamiento médico.

Muy seguido en la neuralgia cervicobraquial puede resolverse de manera conservadora los cuales incluyen, reposo y tratamiento antiinflamatorio, en ocasiones corticoides en la parte inicial. También con relevantes musculares, analgésicos (en ocasiones morfina). Podemos también proponer de manera transitoria la utilización de un collarín suave, en ocasiones la fisioterapia para patologías de columna puede ser de gran ayuda.