Lo Ultimo

Recorre, conoce y disfruta tu ciudad porque transitar no es vivir.

 
ÁNGEL SALCEDO - Desde que surgió el tema de la pandemia nos hemos obligado a regresar a los espacios cerrados, por el cuidado de nosotros y de nuestros seres queridos y estamos cultivando los hábitos de vivir en interiores.

Hoy el ser humano esta expuestos de peligros naturales, como los nuevos virus que surgen obligado al ser humano a resguardarse con medidas de bioseguridad en los  espacios exteriores. Entre las flexibilizaciones podemos salir, pero nos limitamos a las distancias, pero podemos empezar a conocer un mundo nuevo desde tu entorno, el recorrer, convirtiéndote en un turista en tu ciudad, te ayuda a valorar y disfrutar tu vida.

Los dispositivos electrónicos que nos conectan con la red como los celulares, parecen haber sustituido, de alguna manera, la vivencia personal y directa. La vivencia a través de estos medios nos aleja cada vez más, a pesar que sentimos cerca de nuestros seres queridos pero la realidad es que nosotros nos aislarnos cada vez más.

Hoy, los espacios exteriores se vuelven de tránsito y no de disfrute con nuestros seres cercanos. No quiero decir con esto que tenemos que desconectar los televisores, quitarle la batería a los teléfono, cancelar el Internet. Creo que a través de estos medios podemos redescubrir otros modos de vivir afuera, de experimentar la ciudad y sus posibilidades.

Tampoco quiero decir que para disfrutar la ciudad debemos llegar tarde a nuestros hogares, considero que es el momento justo para iniciar una valoración de lo que somos en el mundo, que tenemos una familia, que tenemos amistades, de reorganizar y repensar sobre nuestro circulo social.

Lo que deseo indicar, es que a pesar de la pandemia, podemos llevar una vida mas sana mentalmente hablando, que no debemos limitarnos en los espacios externos, que salgamos a disfrutar el recorrer un poco mas allá en compañía de los seres queridos que tenemos cerca, que los dispositivos sirva de acercarnos a los que están en distancias extremas pero que no sea la única vía, que nos convirtamos en turistas en nuestra propia ciudad.

Cierro compartiendo con un recuerdo de mi niñez: Recuerdo cuando junto a mis padres y mi hermano viajábamos a un destino que escogía mi papa, escuchando música, sin preocupaciones de medios electrónicos, de un correo, notificación de alguna red, de una llamada "X". Solos en familia, recorriendo, conociendo nuevos sitios, entendiendo que el mundo es mas grande que simple paredes y fronteras políticas e imaginarias, solo en familia…